Ir al contenido principal

Hundiendo el Kodachrome


Los embalajes de los primeros Kodachrome obedecían a un bello diseño "Art-Deco", y se especificaba que la película estaba destinada a las cámaras de 35 mm Contax, Leica y Retina
© Eastman Kodak


Es altamente probable que Kodak anuncie en breve que su laboratorio situado en la ciudad suiza de Lausana cerrará todas sus líneas de procesado actuales excepto la dedicada a las películas Kodachrome . Esta medida sigue al reciente cierre de los laboratorios de Kodak en Valencia y Sabadell, en nuestro país, y la suma de esos dos factores puede suponer un impacto de torpedo adicional, bajo la línea de flotación, contra la película Kodachrome, una inmarcesible película en color para diapositivas cuyo revelado va ya incluido en el precio, desde la presentación de la versión original, en el año 1936. La película Kodachrome fue la primera película tricapa en el tiempo (inicialmente para cine de aficionados) y es la primera en calidad, aún hoy día, sobre todo en lo se refiere a acutancia y buenas características de conservación en archivo. La razón del riesgo adicional que se cierne sobre esta especie amenazada no es otra que, en breve, aquellos fotógrafos españoles que deseen ver procesadas sus películas, deberán enviarlas por su cuenta y riesgo al mencionado laboratorio de Lausana. En nuestro país, hasta ahora, y una vez expuestas, las películas Kodachrome se podían entregar para su procesado en unas pocas tiendas de fotografía, desde donde eran recogidas y enviadas a los laboratorios de Kodak en Valencia. Desde allí, eran reexpedidas hasta Lausana, para luego hacer el recorrido inverso. A la espera de entre dos y tres semanas hasta poder ver los resultados que todo ese proceso suponía ya, se sumarán en breve los gastos adicionales de portes para el usuario de la mítica película, y lo que es mucho más grave: el riesgo añadido de pérdida de los rollos si se envían por el servicio postal convencional. Y eso para no hablar de riesgo de exposición accidental a temperaturas elevadas, radiación etc.
En los tiempos en los que se dedicaba a los productos y a los usuarios la atención merecida a la fidelidad a una marca, existía un laboratorio para Kodachrome en Madrid (Colmenar Viejo). Ni que decir tiene que en Francia y Alemania, por citar solo unos pocos países europeos, eran numerosos.
En mi modesta opinión, la película Kodachrome resulta molesta a Kodak en la coyuntura “todo digital”, y como le falta valor para “cargarse” su película más emblemática, hace por su parte todo lo posible para que al usuario le resulte cada vez más problemático y engorroso utilizarla: cierre progresivo de laboratorios, reducción en la oferta de variantes (ya fenecieron la Kodachrome 25 y a todos los efectos prácticos, la 200), etc.



En su momento, la firma cesará en su producción alegando que es por motivos “de poca demanda”. Claro. Al tiempo.
Según mis cómputos, en este momento “quedan” en activo un laboratorio en U.S.A., otro en Japón, y el citado de Lausana. Si cesase la producción en este momento, la película Kodachrome habría estado en el mercado 69 años, cifra que seguro que no es del gusto de las conservadoras mentes de Rochester. No esperarán mucho más. En este caso, al ser en color no nos podrán recomendar que en su lugar empleemos la Kodak T-Max 100.

Corneta: ve limpiando la boquilla y preparándote para tocar “silencio” por una próxima baja más, víctima de la globalización de la mediocridad.



Fotografía original de la película Kodachrome, en el año de su presentación, 1936. Puede observarse la bolsa para el envío cara a su procesado.
© Eastman Kodak




© Eastman Kodak
La película Kodachrome, creación de Leopold Mannes y Leopold Godofsky, fue presentada, inicialmente en película de 16 mm para cine de aficionados.



Actualizar Blog

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Nostalgia por el Kodachrome?

En el año 1935 se presentó el Kodachrome 135-36 y en el año 1936 la Kine Exakta, la primera SLR para película de 35 mm ¡Buenas añadas! © Valentín Sama (*) Todo lo que necesitas conocer acerca del Kodachrome, incluyendo algunas cosas que –quizá– te contaron mal... Los orígenes El escenario es una avenida de la ciudad de Nueva York, en un anochecer de 1917 . Leopold Mannes y Leopold Godowsky Jr. salen de visionar en un cine el filme «Our Navy» , y se lamentan de la pobre «reproducción de color» –si es que se le puede llamar así– que ofrece el sistema de proyección «Prisma», similar al «Kinemacolor», que se fundamenta en un dispositivo bastante burdo, de filtros aditivos rotativos frente al objetivo del proyector. La realidad es que, a la sazón no existe ninguna película en color «tripack» viable. Algo une a los dos Leopoldos además de su nombre: ambos son músicos profesionales, y acostumbran a dar recitales, de violín y piano, Godowsky y Mannes, respectivamente. Pero hay algo más: los...

«Pentax 17»: algún detalle que no te han contado

Los artículos sobre la nueva cámara para medio formato sobre película,  Pentax 17 , abundan, y aunque la mayoría son meras transcripciones de la nota de prensa, hay incluso alguna apresurada «review» ya publicada. Personalmente ya aventuré alguna opinión antes de su lanzamiento , pero ahora, veo que resulta conveniente avanzar algunos detalles que parece que tanto a Pentax como a esos primeros «desembaladores» y «probadores» de la cámara se les han pasado por alto . Y pueden tener su importancia... veamos. Actualizado a 25/03/2025 Nada de codificación DX © Ricoh Pentax Atentos a esos dos diales... © Ricoh Pentax  La Pentax 17 permite a sus usuarios seleccionar manualmente el ajuste ISO de la película a utilizar, o quizá debiéramos decir «exige» , ya que no incorpora lectura de los códigos DX de los chasis de película. Ello no es ni bueno ni malo, y de hecho ofrece alguna posibilidad (1) para usuarios avanzados, aunque ese no sea «el grupo objetivo» de esta camarita. Los aju...

Esas «nuevas» viejas películas con sus brillantes trajes; la Ilusión

Hace algo más de dos años, en el artículo titulado «De qué hablamos, cuando hablamos del amor... por una película concreta» (*), escribía yo: «Fabricar  una película fotográfica, incluso tan sólo en blanco y negro, es una tarea nada fácil, que requiere grandes y prolijas instalaciones, así como una puesta en marcha –para el arranque de cada colada de producción– sumamente delicada. Se trata de una economía de escala. Por eso, quizá, debiéramos ver con un cierto escepticismo cuando un pequeño comerciante, gestor de sitio web o... «blogger», lanza al mercado  «una nueva película» . Ello incluiría a firmas bien establecidas, como puede ser Lomography. ¿Qué puede haber tras esas «nuevas películas», muchas en «edición limitada» y con embalajes y presentaciones en más de una ocasión ciertamente muy atractivas?» Un clásico de hace más de 10 años: Svema, Reala, Lucky 400, Efke, formato Quickload... muchos de esos materiales ya no se fabrican. ¿Cuánto de genuino habría en una toma...