En el año 1998, Leica presentó, para su sistema de cámaras telemétricas «M» un objetivo atípico, que podría considerarse hasta cierto punto «absurdo» dentro de ese propio ecosistema «M», sistema que brilla precisamente por sus ópticas de focal fija: el «Tri-Elmar-M 28-35-50 mm ASPH. », un objetivo que ofrece, monolíticamente, las focales «fijas» de 28 mm, 35 mm y 50 mm. Un objetivo que el propio Erwin Puts (1) definía como . ..«un hito en diseño y construcción óptica y mecánica, una hazaña de ingeniería de desafiante complejidad, ofreciendo a los usuarios del sistema Leica-M una suerte de objetivo "zoom" dotado de una calidad óptica capaz de retar a las mejores ópticas a nivel mundial.» © Valentín Sama En la Photokina del año 2.000 Leica introdujo mejoras de ergonomía para el aro de enfoque, conservando el brillante diseño óptico e incorporando refinamientos mecánicos. (2). Antes de entrar en materia acerca de las razones por las que este objetivo es tan particular, unos poc...
Un espacio de Valentín Sama, sobre Fotografía. Desde 2004