Ir al contenido principal

Leica M digital a 6 bit: en el más puro estilo Leica


La nueva montura Leica M estará dotada, desde primeros de julio, de codificación óptica a 6 bit

Leica reinventa –y podrá repatentar– la famosa montura Leica M, al introducir una nueva versión, derivada de la primera, y dotada de un sistema de codificación a 6 bit a través de señales o “contactos” ópticos en la montura, tanto en el lado de la cámara como en el de los nuevos objetivos.
Y todo ello, claro está, tiene una gran relación con la nueva Leica M digital, que se presentará en la Photokina de este otoño.

El nuevo código permitirá a la no menos nueva Leica M digital “reconocer” de que objetivo se trata, y en base a la “caracterización” de dicho objetivo, optimizar las prestaciones del CCD del entorno de los 10 megapíxeles y factor 1,33 que probablemente incorporará dicha cámara.

Los nuevos objetivos “codificados”, que se suministrarán ya desde este primero de julio serán plenamente compatibles con las Leica M producidas desde 1954, y a la inversa, al tiempo que una parte importante de los objetivos anteriores en montura Leica M, producidos desde 1953, podrá adaptarse en fábrica a las nuevas especificaciones a un precio asumible por el usuario de equipos de tan alta calidad: tan solo 95 euros.

Tal como expliqué en mi informe acerca del Centenario de Victor Hasselblad, un sistema parecido se emplea ya en las Hasselblad H2D para conseguir digitalmente, a través de firmware, una corrección apocromática. Distorsión, viñeteado y otros “pecadillos” ópticos pueden corregirse por ese mismo procedimiento.
Dentro de la línea de producción actual, el único objetivo que no recibirá la nueva montura de codificación óptica es el Leica Apo-Telyt-M f/3,4: se considera que no se trata de un objetivo realmente utilizable debido a que con el factor de prolongación de 1,33 se sale de la lógica de una cámara de telémetro.

Este tipo de codificación se define como de “6 bit” debido a que existen seis campos en el área de la bayoneta, campos que están marcados en blanco o en negro, permitiendo conseguir un código binario del 1 al 64.
Lo más interesante es que la nueva Leica M digital “leerá” esas zonas blancas o negras literalmente, al hacerlo ópticamente, no electrónicamente.
La información correspondiente al objetivo de que se trata permite no solo “tratar” la imagen en cámara, sino que al adjuntarse al archivo de imagen como metadatos EXIF, ello deja abierto el paso a una optimización posterior a través de software específico, en el ordenador.

Rainer Bültert, "product manager" para el sistema M de Leica Camera AG, indica que …”en base a su calidad legendaria, casi todos objetivos Leica M resultan ideales para aplicaciones digitales, y sin embargo, el nuevo código de 6 bit permite utilizar las reservas de rendimiento de la capacidad de procesado de imagen en la cámara, a fin de ofrecer a nuestros clientes los excelentes resultados de imagen que esperan por parte de Leica”.

En mi opinión, un buen “golpe” de Leica, por el que no solo ofrece lo mejor del mundo clásico y el nuevo mundo digital, sino que además, lo hace a su estilo: “Leicalike”, esto es, con un diseño limpio, óptico, y además, conservando la compatibilidad hacia delante y hacia detrás.
Manteniendo el compromiso con sus usuarios.


La lista de los objetivos que pueden convertirse al nuevo código de 6 bit puede obtenerse descargando el archivo PDF correspondiente.
Para los que se defiendan un poquito en francés puede recomendarse seguir el enlace lista de los nuevos objetivos y convertibles.




Actualizar Blog

Comentarios

Entradas populares de este blog

Esas «nuevas» viejas películas con sus brillantes trajes; la Ilusión

Hace algo más de dos años, en el artículo titulado «De qué hablamos, cuando hablamos del amor... por una película concreta» (*), escribía yo: «Fabricar  una película fotográfica, incluso tan sólo en blanco y negro, es una tarea nada fácil, que requiere grandes y prolijas instalaciones, así como una puesta en marcha –para el arranque de cada colada de producción– sumamente delicada. Se trata de una economía de escala. Por eso, quizá, debiéramos ver con un cierto escepticismo cuando un pequeño comerciante, gestor de sitio web o... «blogger», lanza al mercado  «una nueva película» . Ello incluiría a firmas bien establecidas, como puede ser Lomography. ¿Qué puede haber tras esas «nuevas películas», muchas en «edición limitada» y con embalajes y presentaciones en más de una ocasión ciertamente muy atractivas?» Un clásico de hace más de 10 años: Svema, Reala, Lucky 400, Efke, formato Quickload... muchos de esos materiales ya no se fabrican. ¿Cuánto de genuino habría en una toma...

«El fotógrafo que no sabía mirar»: el más reciente libro de Fernando Puche, ya disponible

Después de años y años publicando artículos sobre la práctica de la fotografía y su relación con la memoria, los prejuicios, las expectativas o los referentes externos, Fernando Puche publica un libro de relatos cortos. © Valentín Sama Una novedad dentro de la producción editorial del autor, que en esta ocasión ha querido abordar el hecho fotográfico desde la ficción. Una obra dividida en aproximadamente una veintena de cuentos (todos inéditos) que exploran las facetas más cotidianas de esta práctica a través del humor, la exageración, el absurdo o la ironía. Una obra ilustrada por el reconocido diseñador e ilustrador Jacobo Pérez-Enciso, que aporta toda su maestría y su personalidad creadora para dotar al libro de un encanto muy particular. Un libro único en este país dentro de la producción editorial relacionada con la fotografía. © Valentín Sama Personalmente, debo decir que he leído y releído este precioso y delicado libro, editado con papeles de selectas texturas, y no puedo si...

2025: centenario de la cámara Leica

En enero de 1925 –hace ahora un siglo– comenzó  el ensamblaje de las primeras unidades de producción de la «Leica Kamera» y en febrero de ese mismo año se comenzaron a despachar esas pioneras unidades hacia el comercio especializado. ¡Había comenzado la era de fotografía en 35 mm con el novedoso formato «Barnack»! El 24 x 36 mm que ahora –curiosa y empecinadamente– siguen una gran parte de los fabricantes de cámaras digitales. Pero la historia había comenzado bastante antes: hacia 1911, cuando Oskar Barnack –un mecánico de precisión de 31 años– se incorpora a la empresa Ernst Leitz Optische Werke de la ciudad germana de Wetzlar. (1). © Valentín Sama «Ur Leica» © Leica Encargado del desarrollo de una cámara cinematográfica para película de 35 mm decide crear un pequeño dispositivo –una cámara primitiva– para probar «puntas» de las grandes bobinas de esa película cinematográfica, cuya sensibilidad real, variaba notablemente de un número de emulsión a otro: se trataba de reducir el de...