En Eastman Kodak Co. se ha tomado la decisión de dejar de fabricar sus papeles fotográficos en blanco y negro para finales de este año 2005. Algo tendrá que ver ello con la decisión de Antonio Pérez, Jefe Ejecutivo, de eliminar entre 12.000 y 17.000 puestos de trabajo para el año 2007. El papel en blanco y negro se producía en una fábrica en Brasil, si bien no se ha hecho público el numero de empleados ocupados en dicha fábrica.
A decir verdad, al parecer no se ha dicho por el momento simplemente nada, pues en ninguna de las páginas Web de Eastman Kodak figura la noticia ni se ha recibido en las redacciones de las revistas fotográficas más importantes nota de prensa alguna.
Pero la realidad es que Kodak rompe con una tradición productiva de casi un siglo, y en todo caso, ello es una pena.
Ya podéis imaginar que el argumento empleado es que la disminución en la demanda de ese tipo de material es de un 25% anual, siempre según el portavoz de la firma, David Lanzillo.
La verdad es que, al menos en nuestro país, ya no echaremos mucho de menos esos papeles Kodak, pues la distribución no brillaba precisamente por su brillantez, y en la mayor parte de las ocasiones cuando había una emulsión faltaba en el tamaño que necesitábamos y viceversa y cuando encontrábamos lo que necesitábamos quizá no lo había en suficiente cantidad…
Y ello a pesar de que en los últimos tiempos me consta que hubo alguna honestas personas en Kodak España S.A. (Ángel Buquerin, Aline Retoré, entre otras), que intentaron sacar adelante, con entusiasmo ese producto.
Como en tantas otras ocasiones, de lo que se habla es de "negocio" y lo que no es negocio, desaparece. Como ya he comentado en otras ocasiones (Adiós Technical Pan), la cuestión filosófica radica en si los usuarios, los consumidores optaremos por apoyar las compañías por su visión del negocio o por su visión de la Fotografía, con mayúscula... aunque hagan menos negocio.
Lo que si está claro es que Antonio Pérez parece ver solo "unos" y "ceros", convertibles en evanescentes imágenes a través de costosos cartuchos de tinta de capacidades homeopáticas y deletéreos efectos para los presupuestos domésticos.
Buena suerte.
A decir verdad, al parecer no se ha dicho por el momento simplemente nada, pues en ninguna de las páginas Web de Eastman Kodak figura la noticia ni se ha recibido en las redacciones de las revistas fotográficas más importantes nota de prensa alguna.
Pero la realidad es que Kodak rompe con una tradición productiva de casi un siglo, y en todo caso, ello es una pena.
Ya podéis imaginar que el argumento empleado es que la disminución en la demanda de ese tipo de material es de un 25% anual, siempre según el portavoz de la firma, David Lanzillo.
La verdad es que, al menos en nuestro país, ya no echaremos mucho de menos esos papeles Kodak, pues la distribución no brillaba precisamente por su brillantez, y en la mayor parte de las ocasiones cuando había una emulsión faltaba en el tamaño que necesitábamos y viceversa y cuando encontrábamos lo que necesitábamos quizá no lo había en suficiente cantidad…
Y ello a pesar de que en los últimos tiempos me consta que hubo alguna honestas personas en Kodak España S.A. (Ángel Buquerin, Aline Retoré, entre otras), que intentaron sacar adelante, con entusiasmo ese producto.
Como en tantas otras ocasiones, de lo que se habla es de "negocio" y lo que no es negocio, desaparece. Como ya he comentado en otras ocasiones (Adiós Technical Pan), la cuestión filosófica radica en si los usuarios, los consumidores optaremos por apoyar las compañías por su visión del negocio o por su visión de la Fotografía, con mayúscula... aunque hagan menos negocio.
Lo que si está claro es que Antonio Pérez parece ver solo "unos" y "ceros", convertibles en evanescentes imágenes a través de costosos cartuchos de tinta de capacidades homeopáticas y deletéreos efectos para los presupuestos domésticos.
Buena suerte.
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