Primera imagen, en "teaser", ofrecida hace unos días de la "ELBAFLEX" |
Pienso que una gran mayoría está familiarizada ya con el concepto de micromecenazgo o "crowdfunding", cada vez más popular a través de plataformas tales como "Indiegogo" o muy particularmente "Kickstarter" (1).
Resumiendo mucho para los menos iniciados:
1) Tienes una idea para producir algún producto que consideras interesante, pero no tienes fondos para llevar a cabo la empresa
2) Creas un prototipo más o menos funcional
3) Diseñas unos "rewards" o "recompensas" –con distintos precios y composiciones o "kits"– algunos de los cuales incluirán el producto a desarrollar
4) Calculas cuánto dinero te haría falta para llevar a término el producto así como para poder crear y enviar los "rewards" a cada patrocinador individual
5) Fijas la cantidad a recaudar y un plazo para la acción
6) Si alcanzas la meta económica te pones a la tarea final y si todo va bien, comercializas el producto.
Desde luego, hay muchos más "flecos" y entre ellos está la creación de una buena página web, una "newsletter", mantener un buen flujo de comunicación y naturalmente, cumplir con los compromisos.
Nuestro sector fotográfico, es lógicamente uno de los abonados al crecimiento de este tipo de campaña: puede ser la creación de un accesorio, el desarrollo de una nueva película, la producción o reedición de un objetivo fotográfico, o quizá una nueva cámara, por poner solo unos pocos ejemplos. A partir de este punto ese terreno queda abonado igualmente a un cierto grado de abuso, y ello –siempre en mi opinión personal– en más de un aspecto. Tomemos algún ejemplo.
El travestido
Hace pocos días, se ha anunciado la creación de una "nueva" cámara analógica, la "Ihagee ELBAFLEX". El equipo de trabajo –basado parte en Ucrania y parte en Alemania– está íntimamente relacionado con el de firmas tales como Meyer Optik Görlitz u Oprema, que han basado su actividad en ese tipo de campaña, y de hecho ya se ha abierto una al respecto. (ver abajo)
La nueva Ihagee Elbaflex © Elbaflex |
Os pongo solo un párrafo de lo que avanzan los responsables de este proyecto: "Besides these technical changes on the inside, the team has designed a beautiful body along the line of the famous German Ihagee ELBAFLEX camera."
En versión española: "Aparte de los citados cambios técnicos en el interior, el equipo ha diseñado un bello cuerpo siguiendo la línea de la famosa cámara germana Ihagee ELBAFLEX".
Ihagee fue el famoso fabricante alemán creador –entre otras muchas cámaras– de la Kine Exakta, la primera réflex monocular para película de 35 mm (1936). La ELBAFLEX, una variante solo en nombre de la Exakta VX 1000 fue producida entre 1968 y 1970, y comercializada solo en unos pocos países europeos. Os muestro unas imágenes de esta cámara.
El visor de capuchón es intercambiable por uno de pentaprisma en la ELBAFLEX original © Valentín Sama |
a) la "nueva" ELBAFLEX se parece "como un huevo a una castaña" a la original.
b) la "nueva" ELBAFLEX tiene todo el aspecto de ser una KIEV 19M (de la rusa Arsenal), con las inscripciones de Ihagee y ELBAFLEX, además del añadido de una tosca empuñadura de madera. Vamos... una travestida.
Con variaciones lógicas, las auténticas Exakta de Dresden –en las orillas del ELBA– siguieron la línea de la original de 1936 (2) © Valentín Sama |
Es cierto que no se oculta –sin citar el nombre– que la nueva cámara está basada en otra rusa de hacia 1980, y las mejoras que se asegura que se han introducido confirman prácticamente que se trata de la KIEV 19M, famosa aparte de por copiar la montura Nikon F Ai, por los frecuentes fallos del obturador, el sistema de medición y las juntas de estanqueidad a la luz. De hecho, al parecer los problemas del exposímetro se han solucionado de forma radical: eliminándolo.
Una Ihagee ELBAFLEX auténticamente original (1968-1970) © Valentín Sama |
En cuanto a los precios, os avanzo que están entre los aproximadamente 500 € y 600 € según lo que "se corra" para pagar por una cámara que –en principio– no estaría lista hasta agosto de 2018.
Si se lee atentamente, se podrá comprobar que –tras finalizar la campaña– la cámara solo se producirá bajo demanda, a un precio indeterminado.
En un próximo post os hablaré de un "pequeño" detalle: las campañas de este tipo "Kickstarter" están concebidas inicialmente para particulares que no disponen de capital para llevar a cabo sus proyectos más o menos creativos y no precisamente para empresas o corporaciones ya plenamente establecidas y que sí que disponen de capital. Creo que intuís por dónde va el tema... Lo dicho: para otro día.
Campaña Kickstarter para la "ELBAFLEX"
(1) El "Kickstarter" es la palanca que permite arrancar, mediante un patada ("kick") sabiamente administrada, aquellas motocicletas que carecen de motor eléctrico para la puesta en marcha. En algunos casos como recurso de apoyo caso de fallar este.
(2) Bajo la bota de la DDR, también hubo Exaktas basadas en cuerpos de Praktica e incluso de alguna cámara japonesa, pero eso es...una larga historia.
Comentarios
Gracias por su comentario. Ya verá cómo han resuelto el problema del mal funcionamiento crónico del sistema de medición de la KIEV 19M en la que se basa este "ersatz"...¡eliminándolo!
Sobre lo del precio final una vez pasada la campaña Kickstarter escribiré más pronto que tarde en un próximo post. Fíjese además, que esas unidades se harán "por encargo"...
En fin...
Saludos
Valentín Sama