Con muy pocas semanas de diferencia se han producido dos noticias relacionadas en el "mundo Leica", un "biotopo" un tanto ajeno al público en general, si exceptuamos a los "Leica-haters" que saltan alborozados cuando toca criticar aquel nuevo objetivo, o cuerpo de cámara, bien en base a su precio, bien según sus –quizá– atrevidas soluciones.
La primera entrada no es sino la presentación de la nueva SL2 de Leica –nueva generación de su "sin espejo" de formato Barnack (24 x 36 mm)–, al tiempo que la segunda viene representada por un manifiesto de Erwin Puts, un analista que es quizá el mayor experto en productos Leica de todos los tiempos. A través de su escrito "Farewell to the Leica World", el autor holandés hace pública su decisión de abandonar el "Mundo Leica".
Ese manifiesto, en traducción aproximada, reza así:
"Durante más de 35 años he estado íntimamente involucrado en el Mundo Leica, abarcando la historia de la compañía, el análisis de los productos y el empleo de los mismos; todo ello bajo el paraguas del concepto "Leica World" (Mundo Leica).
He gozado de encuentros y discutido con detalle con personas relevantes en Wetzlar (sitio antiguo), luego Solms, y de nuevo en Wetzlar (nuevo sitio) acerca de la transición digital y cómo la compañía evolucionó y cambió conforme a la digitalización del proceso fotográfico, así como el cambiante mundo de la fotografía basada en Internet.
El evento más reciente es la evolución [por parte de Leica] de una compañía manufacturera a una compañía basada en el software. Al tiempo que ello ha resultado en un éxito comercial, este cambio de actitud ha conducido a un impacto, quizá no deseado: el "alma" de los productos Leica ha sido erradicada.
El resultado es un renovado interés en productos clásicos. Las [cámaras] SL y Q son –en este momento– esperanzadores productos cara al futuro.
Los fantasmas de Huawei y Panasonic se dejan ver por todo el campus, y mientras el Sistema-M todavía se propugna como el auténtico heredero del linaje Leica, está ahora dejado de lado.
En sus principios, Leica seguía su propio camino, guiada por ingenieros pioneros y de brillante talento, así como por hábiles expertos en mercadotecnia. En la actualidad, los productos de Leica son tan de línea común [vulgares] como los de cualquier otro fabricante de cámaras.
La compañía ha esbozado un futuro, y sigue una senda, que por mi parte ya no estoy dispuesto a seguir."
Erwin Puts comparte su ingente conocimiento sobre el mundo Leica –cámaras, objetivos, reveladores especiales, películas y pruebas técnicas– tanto a través de su pagina personal, como de su blog, pero lo que son especialmente apreciados son sus libros, en general de edición limitada.
Así, desde 2001 me acompaña el "Leica Lens Compendium" (1), una magnífica obra de 240 páginas en la que se describen y evalúan aproximadamente 135 objetivos Leica-M y Leica-R, además de incluir la historia de su diseño, métodos de desarrollo y evaluación óptica, estudio de aberraciones... un pequeño tesoro que estimo está descatalogado, pero disponible –al igual que otros del autor– en formato de "libro" electrónico.
Por su parte, el "Leica Lens Saga / Berek's Legacy: the 50 mm lens for Leica rangefinder cameras", es un extenso tratado (386 páginas) acerca del cálculo y desafío óptico que suponen el desarrollo de los objetivos de focal estándar (50 mm) para las telemétricas de la firma; ópticas que se caracterizan por su extraordinariamente favorable relación tamaño/prestaciones, así como su gran longevidad.
El último recibido es el "Leica Path in the 21st century" (2), una obra dividida en tres partes:
– La historia de la firma y la de los productos, así como su construcción.
– Los fundamentos y principios de la percepción, la estructura de la realidad y los pros y contras de la evolución digital.
– Descripción de un nuevo estilo de la fotografía con cámaras y objetivos Leica.
Me resulta curioso, que el anuncio del Sr. Puts de retirarse del Mundo Leica haya despertado un alto numero de comentarios denigrantes hacia su persona, muy al estilo de los "Leica haters" u "odiadores de Leica", pero en esta ocasión... ¡entre los propios usuarios de la firma!
"Que si [Puts] era muy favorable a Leica, que si no hacía buenas fotos, que si escribe "raro" en inglés [resulta que es holandés...], que si era muy subjetivo, aburrido"...
En fin... no niego que sea denso, pero es que parece que en este terreno y en muchos otros, la capacidad lectora y de comprensión decrece en proporción directa a la popularización de las RRSS...
Volviendo al tema original...¿qué ha podido ocurrir entre el Sr. Puts y Leica?
Personalmente tengo la suerte de conocer bastante el mundillo Leica –y a los alemanes en general– y probablemente, parte de la explicación está en el propio comunicado del experto: desde la ahora muy estrecha colaboración entre Leica, Panasonic y Huawei, "Leica" ya no es lo que era". Pero ello...¿es realmente malo? ¿O quizá mejor dicho, "inevitable"?
La realidad es que, en los tiempos en que las Leica-M eran reinas en la firma, Erwin Puts había sabido entretejer una excelente red de contactos con ingenieros y otros responsables de Leica, lo que le daba acceso a información privilegiada, material para pruebas, etc., y por otro lado, la firma se beneficiaba de su saber y feedback.
Pero los tiempos cambian, la gente se jubila y los contactos se van perdiendo. Quizá los nuevos contactos bien no se producen, bien no están dispuestos a compartir secretos e interioridades... como por ejemplo el hecho de que una Leica SL2 no sea sino un clon de una Panasonic S1R: lo que antes, con las compactas era asumible, ahora –con el buque insignia– chirría más. De Huawei y de los centros comunes de investigación creados con Leica en Wetzlar y Silicon Valley... para qué hablar.
Vamos a comparar algunos aspectos de la serie Leica-M respecto a la serie SL, comenzando por tamaño.
A la izquierda aparece una Leica SL dotada de un APO-Summicron-L 50 mm f/2, al tiempo que a la derecha podemos ver una Leica-M10 dotada de un Summicron-M 50 mm f/2. A notar que la nueva SL2 difiere en tamaño no más de ±3 mm por lado respecto a la SL y que el APO-Summicron-M 50 mm f/2 para la Leica-M es sólo 3,5 mm más largo que la versión estándar, quizá por causa del parasol extensible incorporado.
Si el sensor de ambas cámaras obedece al mismo formato Barnack (24 x 36 mm)...¿cómo es posible una diferencia tan brutal de dimensiones? Maticemos además, que la distancia de registro (3) de la Leica-M es de 27,8 mm y la de las Leica SL/SL2 es de 20 mm. Ello, muy positivo, permite emplear las ópticas "M" sobre las cámaras SL mediante adaptador, pero... también implica otras "servidumbres".
Bien: aunque Stefan Daniel –de Leica– a pesar de su bonhomía no se caracteriza precisamente por una locuacidad excesiva en las entrevistas, hace poco ha explicado que las enormes dimensiones del APO-Summicron-L 50 mm f/2 se deben, por un lado a los motores para el AF y por otro –especialmente– por ser telecéntrico, bien entendido que no empleó la palabra "maldita" popularizada por Olympus (firma a la que tarde o temprano, copia todo el mundo). La corta distancia de registro –más aún que la de la serie M– hace aconsejable ese esquema. Pero es que –además– el "juego" (interplay) entre los objetivos de la serie M y los filtros y vidrios anteriores de los sensores de las cámaras Leica-M está llegando –si no llegó ya– al límite, y eso nos lleva a estimar si –de verdad, tal como opinan Puts y no sólo Puts– la Dirección de Leica está "dejando de lado" al Sistema-M.
No es ya ningún secreto que Leica está trabajando (quizá para mediados/finales de 2020) en una "M-10 Monochrom" de 41 Mpx. Lo ha dado a entender el mismo Stefan Daniel, así como que "habrá más cosas". Es de imaginar que una "Leica-MXX" con un sensor a color de 47 Mpx. derivado del bien probado de la Leica-Q2 sería algo lógico, antes o después de esa tercera versión de la Monochrom.
Desde mi punto de vista, más que dejar de lado el "M-System" lo que ocurre es que el mismo casi ha llegado a su límite tecnológico. ¿Podría haberse hecho una "mirrorless" con visor electrónico y óptica intercambiable para los objetivos manuales del M-System? Desde luego: todavía se puede hacer y quizá fuese un acierto... a un precio asumible: más de uno está usando cuerpos originales de Sony A7 (850 €) con esos objetivos Leica y un simple adaptador Novoflex. Leica dispone ya de la base para ello a través de la tecnología de la Leica Q2: sensor, visor electrónico y pantalla. ¿Se produciría un cierto canibalismo entre las serie M y esa supuesta "MM" (Mirrorless-M)? Cuestión de ajustar precios.
Lo que –en mi opinión– sobraron y fue un "marear la perdiz" son las Leica L y TL... ¡Ayss!
De las versiones horteras como –por ejemplo la Kravitz–, ya me he pronunciado en su momento...
Nos podrán decir que esa "mirrorless M" para ópticas Leica-M ya existe: en la imagen de más arriba una SL2 aparece con el Leica Noctilux-M 75 mm f/1.25 ASPH acoplado mediante adaptador... pero estamos hablando de un cuerpo de 6.000 €...y en lo que piensan los usuarios es en algo más asequible y compacto.
Pero en esa misma imagen, hay otra clave: la SL2 no sólo dispone de pantalla táctil, sino que además se deja controlar mediante un terminal móvil... la modernidad ("modernéz" dirían algunos) ha llegado a Leica... aunque la SL2 al parecer no disponga de un sistema medianamente decente de prevención contra el polvo, al igual que sus "primas del pueblo" Panasonic S1. Esa ausencia, en las digitales del System M se entiende, pero en una moderna cámara de alta gama...
Como veterano de una edad parecida a la de Erwin Puts, le diría –con una buena cerveza y una ración de anguila ahumada por medio, quizá en Marken– que hace bien en apartarse. Que los tiempos cambian y las Compañías Fotográficas más. Que lo que pensábamos que eran amigos –esos contactos– no lo eran tanto.
Y que hoy en día, en el Sector Fotográfico, el que más y el que menos, está tratando de salvar su pellejo. Que disfrute de lo que creo que es su otra pasión y área de experiencia: los gatos. Con ellos, al menos, desde un principio ya sabemos lo que se puede esperar.
(1) ISBN 1-897802-17-X
(2) ISBN 10-9491089137 / ISBN 13-978-9491080138
(3) Distancia entre la montura de la cámara y el plano focal de la película o el sensor
Leica presume de fabricar partes de sus cámaras no por estampado del metal sino por fresado a partir de un bloque del mismo © Leica |
Ese manifiesto, en traducción aproximada, reza así:
"Durante más de 35 años he estado íntimamente involucrado en el Mundo Leica, abarcando la historia de la compañía, el análisis de los productos y el empleo de los mismos; todo ello bajo el paraguas del concepto "Leica World" (Mundo Leica).
He gozado de encuentros y discutido con detalle con personas relevantes en Wetzlar (sitio antiguo), luego Solms, y de nuevo en Wetzlar (nuevo sitio) acerca de la transición digital y cómo la compañía evolucionó y cambió conforme a la digitalización del proceso fotográfico, así como el cambiante mundo de la fotografía basada en Internet.
El evento más reciente es la evolución [por parte de Leica] de una compañía manufacturera a una compañía basada en el software. Al tiempo que ello ha resultado en un éxito comercial, este cambio de actitud ha conducido a un impacto, quizá no deseado: el "alma" de los productos Leica ha sido erradicada.
El resultado es un renovado interés en productos clásicos. Las [cámaras] SL y Q son –en este momento– esperanzadores productos cara al futuro.
Los fantasmas de Huawei y Panasonic se dejan ver por todo el campus, y mientras el Sistema-M todavía se propugna como el auténtico heredero del linaje Leica, está ahora dejado de lado.
En sus principios, Leica seguía su propio camino, guiada por ingenieros pioneros y de brillante talento, así como por hábiles expertos en mercadotecnia. En la actualidad, los productos de Leica son tan de línea común [vulgares] como los de cualquier otro fabricante de cámaras.
La compañía ha esbozado un futuro, y sigue una senda, que por mi parte ya no estoy dispuesto a seguir."
Erwin Puts comparte su ingente conocimiento sobre el mundo Leica –cámaras, objetivos, reveladores especiales, películas y pruebas técnicas– tanto a través de su pagina personal, como de su blog, pero lo que son especialmente apreciados son sus libros, en general de edición limitada.
© Valentín Sama |
Por su parte, el "Leica Lens Saga / Berek's Legacy: the 50 mm lens for Leica rangefinder cameras", es un extenso tratado (386 páginas) acerca del cálculo y desafío óptico que suponen el desarrollo de los objetivos de focal estándar (50 mm) para las telemétricas de la firma; ópticas que se caracterizan por su extraordinariamente favorable relación tamaño/prestaciones, así como su gran longevidad.
El último recibido es el "Leica Path in the 21st century" (2), una obra dividida en tres partes:
– La historia de la firma y la de los productos, así como su construcción.
– Los fundamentos y principios de la percepción, la estructura de la realidad y los pros y contras de la evolución digital.
– Descripción de un nuevo estilo de la fotografía con cámaras y objetivos Leica.
Me resulta curioso, que el anuncio del Sr. Puts de retirarse del Mundo Leica haya despertado un alto numero de comentarios denigrantes hacia su persona, muy al estilo de los "Leica haters" u "odiadores de Leica", pero en esta ocasión... ¡entre los propios usuarios de la firma!
"Que si [Puts] era muy favorable a Leica, que si no hacía buenas fotos, que si escribe "raro" en inglés [resulta que es holandés...], que si era muy subjetivo, aburrido"...
En fin... no niego que sea denso, pero es que parece que en este terreno y en muchos otros, la capacidad lectora y de comprensión decrece en proporción directa a la popularización de las RRSS...
Volviendo al tema original...¿qué ha podido ocurrir entre el Sr. Puts y Leica?
Personalmente tengo la suerte de conocer bastante el mundillo Leica –y a los alemanes en general– y probablemente, parte de la explicación está en el propio comunicado del experto: desde la ahora muy estrecha colaboración entre Leica, Panasonic y Huawei, "Leica" ya no es lo que era". Pero ello...¿es realmente malo? ¿O quizá mejor dicho, "inevitable"?
Leica SL2. El ángulo de toma –en realidad un probable "render"– no refleja las proporciones reales del objetivo... © Leica |
Pero los tiempos cambian, la gente se jubila y los contactos se van perdiendo. Quizá los nuevos contactos bien no se producen, bien no están dispuestos a compartir secretos e interioridades... como por ejemplo el hecho de que una Leica SL2 no sea sino un clon de una Panasonic S1R: lo que antes, con las compactas era asumible, ahora –con el buque insignia– chirría más. De Huawei y de los centros comunes de investigación creados con Leica en Wetzlar y Silicon Valley... para qué hablar.
Vamos a comparar algunos aspectos de la serie Leica-M respecto a la serie SL, comenzando por tamaño.
Cortesía Camera Size |
Si el sensor de ambas cámaras obedece al mismo formato Barnack (24 x 36 mm)...¿cómo es posible una diferencia tan brutal de dimensiones? Maticemos además, que la distancia de registro (3) de la Leica-M es de 27,8 mm y la de las Leica SL/SL2 es de 20 mm. Ello, muy positivo, permite emplear las ópticas "M" sobre las cámaras SL mediante adaptador, pero... también implica otras "servidumbres".
Bien: aunque Stefan Daniel –de Leica– a pesar de su bonhomía no se caracteriza precisamente por una locuacidad excesiva en las entrevistas, hace poco ha explicado que las enormes dimensiones del APO-Summicron-L 50 mm f/2 se deben, por un lado a los motores para el AF y por otro –especialmente– por ser telecéntrico, bien entendido que no empleó la palabra "maldita" popularizada por Olympus (firma a la que tarde o temprano, copia todo el mundo). La corta distancia de registro –más aún que la de la serie M– hace aconsejable ese esquema. Pero es que –además– el "juego" (interplay) entre los objetivos de la serie M y los filtros y vidrios anteriores de los sensores de las cámaras Leica-M está llegando –si no llegó ya– al límite, y eso nos lleva a estimar si –de verdad, tal como opinan Puts y no sólo Puts– la Dirección de Leica está "dejando de lado" al Sistema-M.
La futura M-10 Monochrom tendrá, probablemente, un aspecto muy similar al de esta M10-P © Leica |
Las distancias cortas de registro permiten estas hibridaciones. El "focus peaking" y "la lupa" facilitan el enfoque manual © Valentín Sama |
Lo que –en mi opinión– sobraron y fue un "marear la perdiz" son las Leica L y TL... ¡Ayss!
De las versiones horteras como –por ejemplo la Kravitz–, ya me he pronunciado en su momento...
La Leica SL2 no sólo dispone de pantalla táctil, sino que además se deja controlar desde un terminal móvil... © Leica |
Pero en esa misma imagen, hay otra clave: la SL2 no sólo dispone de pantalla táctil, sino que además se deja controlar mediante un terminal móvil... la modernidad ("modernéz" dirían algunos) ha llegado a Leica... aunque la SL2 al parecer no disponga de un sistema medianamente decente de prevención contra el polvo, al igual que sus "primas del pueblo" Panasonic S1. Esa ausencia, en las digitales del System M se entiende, pero en una moderna cámara de alta gama...
Como veterano de una edad parecida a la de Erwin Puts, le diría –con una buena cerveza y una ración de anguila ahumada por medio, quizá en Marken– que hace bien en apartarse. Que los tiempos cambian y las Compañías Fotográficas más. Que lo que pensábamos que eran amigos –esos contactos– no lo eran tanto.
Y que hoy en día, en el Sector Fotográfico, el que más y el que menos, está tratando de salvar su pellejo. Que disfrute de lo que creo que es su otra pasión y área de experiencia: los gatos. Con ellos, al menos, desde un principio ya sabemos lo que se puede esperar.
(1) ISBN 1-897802-17-X
(2) ISBN 10-9491089137 / ISBN 13-978-9491080138
(3) Distancia entre la montura de la cámara y el plano focal de la película o el sensor
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