Para mí, dedicarse a hacer fotos tiene mucha más relación con la expresión «echar la vista atrás» que con esa otra que habla de «huir hacia adelante». Es así porque la fotografía tiene que ver, creo yo, con tomar conciencia de lo que hacemos y con reconsiderar las decisiones que vamos tomando. En realidad, revisar nuestra obra es algo más que admirar lo que hemos hecho: significa examinar lo que hemos sido.
![]() |
© Fernando Puche |
Cuando miro mis fotos veo paisajes, pero sobre todo imagino al fotógrafo que era en cada época de mi carrera. Si miro con más detenimiento puedo entrever los sueños que tenía y las influencias que dominaban mi mirada. Revisar mi obra significa conocer cómo me relacionaba con esos mismos paisajes y rememorar lo que sentía por ellos. Significa entender su origen y advertir cómo han cambiado. Significa saber de dónde vengo e intuir hacia dónde me dirijo. No es obligatorio, faltaría más, pero es importante puesto que fotografiar es un eterno retorno.
Abecedario fotográfico para tiempos líquidos: «A», de Afecto / «B», de Barrera / «C», de Concepto / «D», de Deseo / «E», de Evolucionar / «F», de Fracaso / «G», de Guiar / «H», de Herencia / «I», de Implicación / «J», de Juicio / «K» de Kilo / «L» de Lugar / «M», de Memoria / «N», de Narciso / »Ñ», de Ñora / «O», de Ostracismo / «P», de Pregunta / «Q», de Quimera /
Comentarios